Alzar las manos y tender las manos
unir las manos y pintar la vida
si no hay pinceles darle con las palmas
sin asco a las paredes
y a los muros
que decididamente no separan
cuando las manos se deciden.
Tender las manos y mirar los ojos
de la inocencia en todos sus colores
para pintar allí donde haya sombras
algún utópico arco iris.
Lils-
11-08-10
Es precioso! Sobre todo para mí, que soy daltónico y no me queda otra que concentrarme en el texto.
ResponderEliminarBesos!
¿Sos daltónico, Relato? Me estás jodiendo!
ResponderEliminarBesos!